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El nombre de esta receta parece redundante: "todo" el mundo sabe que la alcachofa (lo que se come) es un botón previo a una flor... así que de qué hablamos? Pues de esa forma de hacerlas que se ha convertido en una moda últimamente, en la cual se separan las hojas (brácteas) una a una para abrirla.
El resultado es que se consigue una mayor superficie de alcachofa, luego una mayor cantidad de crujiente al pasarlas por la plancha. A mí siempre me han gustado las alcachofas, simplemente cortadas en 2 y planchadas, y confirmo que así mejoran notablemente.
Ingredientes:
6 alcachofas (de Tudela)
aceite de oliva virgen extra
sal en escamas (Maldon)
Elaboración:
La mayor parte del trabajo va a consistir en pelar las alcachofas, aunque el abrirlas en flor, cuando se hace las primeras veces, cuesta un rato.
Para pelarlas, como siempre, vamos arrancando las hojas, cascándolas desde la base, hasta que veamos que quedan las hojas casi enteras amarillas. Cortamos entonces el rabo radicalmente, de forma que el corte quede ancho, y luego también bastante de las hojas (casi la mitad del largo).
Tendremos preparada una cazuela con agua que vaya a cubrir las alcachofas y un par de ramitas de perejil (antioxidante, mejor que el limón), donde iremos echando las alcachofas, apretando un poco el perejil con cada una.
Cuando terminamos con todas las ponemos a hervir, salando el agua adecuadamente. Normalmente, si son buenas alcachofas, necesitarán unos 15 minutos hasta que estén tiernas. Las sacamos del agua y las dejamos enfriar y escurrir.
Ahora viene lo complicado del tema: hay que ir abriendo las hojas de las alcachofas una a una (o casi), doblándolas hacia afuera pero sin que casquen, hasta extender todas. Si te quedan unas pequeñitas en el centro, con un dedo o las aplastas o las meneas para abrirlas.
Ya solamente nos queda pasarlas por la plancha bien aceitada: primero boca abajo, apretándolas ligeramente con una espátula para que haga todo contacto, y luego dando la vuelta para que se dore un poco por la base.
Sacamos recién hechas a una bandeja, regamos con un chorrito de buen aceite de oliva, salpicamos alegremente con escamas de sal y ya podemos llevarlas calentitas a la mesa.
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Dificultad: normal
T. Preparación: 20 min.
T. Cocción: 20 min.