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Pues parece difícil dar una "nueva" receta de patatas fritas, que cualquiera debería saber hacerlas... pero esta forma de hacerlas la hemos descubierto hace poco, y quedan realmente diferentes, más sabrosas y más saludables que las fritas totalmente en aceite.
Las podremos comer solas o como guarnición de cantidad de platos, tanto carnes fritas como en salsa (quedan perfectas para untar), pescados, huevos...
Ingredientes:
2 patatas medianas
aceite de oliva para freir
sal fina marina
Elaboración:
Las patatas las pelamos como siempre, y las cortaremos no muy finas, preferiblemente en plan "casero" o "rústico" (a mí me gusta en cuñas o bastones triangulares, para que queden luego las esquinas más doraditas y crujientes).
Para dos personas usaremos dos patatas medianas o una grande, que pondremos en el microondas en un bol de cristal tapado, con un poco de agua en el fondo, después de salarlas bien y revolver, haciéndolas a 600W (o menos, si hierven muy fuerte) durante 10 minutos, controlando el punto a partir del 8º minuto, y revolviendo un poco a la mitad para que se hagan más por igual. Aunque también se podrían cocer de la forma habitual en agua con sal hasta que estén "casi" hechas.
Las dejamos escurrir y enfriar durante un rato y si hace falta se secan un poco con papel de cocina.
Finalmente freimos en freidora a potencia máxima, hasta que queden bien doraditas.
Pruébalas: disfrutarás con unas patatas fritas muy crujientes por fuera y cremosas por dentro, con más sabor a patata y menos a aceite, y por supuesto mucho más digestivas y saludables al no empapar tanta grasa.
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Dificultad: facil
T. Preparación: 5 min.
T. Cocción: 15 min.